Turista argentino murió en el mar de Brasil

El hecho ocurrió en Meia Praia, dentro del municipio de Itapema, entre Florianópolis y Camboriú.
sábado, 21 de enero de 2017 · 12:33
Brasil.- Un hombre de 34 años identificado como Jorge Aquino falleció en el sector de Mia Praia, en el término municipal de Itapema, Brasil, luego de sufrir una súbita descompensación mientras jugaba en el agua con su hijo.

El fatídico hecho ocurrió entre las 13 y las 14 cuando, según relataron los bañistas que presenciaron la escena, el hombre estaba con el agua apenas a la altura de la cintura y se descompuso.

El resto de la familia del fallecido también estaba en la playa y presenció la fatalidad.

Los guardavidas lo retiraron del mar y percibieron que había vomitado. Le hicieron las maniobras de reanimación indicadas hasta que llegó el helicóptero de la Guardia Costera con un médico que continuó con el RCP, por lo que la atención en la playa se extendió por casi 50 minutos.

Cuando ya nada se pudo hacer, el cuerpo sin vida fue trasladado al Instituto Médico Legal, que se encuentra a unos 30 kilómetros al norte del lugar, en Camboriú.

Aquino había viajado de vacaciones desde Oberá, Misiones.

Según el sitio MisionesCuatro.com el hombre advirtió que estaba por sufrir un infarto y dejó a su pequeño hijo en manos de otro niño de 14 años para que lo sacara del agua.

En su cuenta de Facebook, Mariana Pamela Vera Medina, de Resistencia, Chaco, que presenció los hechos, expresó su indignación por la tardanza de los guardavidas brasileños: "¡¡¡Los salvavidas un desastre!!! Hasta que con sus binoculares registraron el pedido de ayuda de todos nosotros metidos en el agua, recién ahí se tomaron la molestia de reaccionar…”.

Y agregó que su hijo de 14 años estaba nadando al lado del turista, cuando este se dio cuenta de que sufría un infarto y le pidió al niño que agarre a su pequeño hijo. "Mi hijo sale con su hijo a cuestas y entre otras personas vamos al encuentro y él nos dice el papá se está muriendo”, comentó la turista chaqueña.

Itapema es una antigua ciudad turística brasileña, ubicada entre la costa atlántica y la autopista BR101, unos 100 kilómetros más al norte que Florianópolis y 25 kilómetros más al sur que Camboriú.


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