Murió "Pepe" Villanueva, un histórico de Cosquín

Cosquín. Un profundo dolor causó en Cosquín la muerte de José María Villanueva, más conocido como el Tío Pepe, un vecino histórico de la ciudad, que integró la primera Comisión Municipal de Folclore y fue hijo menor de José María y María Pons y Huguet (los fundadores de la Confitería Europea) y un destacado empresario y comerciante.  

Siempre se mostró muy activo, participó de la vida institucional y deportiva de Cosquín desde joven y junto con sus socios tuvieron la Confitería Munich en la década del 70, Reviens en los años 80 (junto a sus hijos Marcelo y Guducho) consolidándose como el boliche bailable más moderno de la región y también se desempeñó como director de Turismo.

"Siempre parecía un tipo parco, quizás con cara de "pocos amigos", pero todos supimos que era un dulce, y como todos los humanos, con sus defectos y virtudes. Cuando tuvo un sueño lo trató de concretar y a lo grande, hoy se fue, nos dejó un legado, hasta siempre Tío Pepe"; escribió Eduardo Villanueva, uno de sus sobrinos, quien además recordó que disfrutaba mucho de pasear por el lago San Roque a bordo de su lancha.