John Marulanda: “Colombia demostró que sacar el Ejército a las calles es un error”

Córdoba. "Colombia está en conflicto armado con la guerrilla desde hace medio siglo; y la experiencia ha demostrado que sacar el Ejército a la calle para combatir la inseguridad es un gran error”, advierte sin eufemismos el ex coronel del Ejército de Colombia, John Marulanda (65), egresado de la Escuela de las Américas es uno de los asesores del ex presidente Álvaro Uribe.

De paso por Córdoba, donde disertó en el III Congreso Internacional de Alta Seguridad, organizado por la Fundación para la Integración de Estrategias Profesionales (FIEP), Marulanda le dijo a El Diario de Carlos Paz que "sacar el Ejército a las calles puede ser una buena acción de marketing que durará sólo 15 minutos. Sólo a políticos irresponsables se les puede ocurrir que las FFAA combatan el delito común. Ante el fracaso de la Policía y la Justicia, sacan este as de la manga, como si fuera una solución mágica. Las FFAA no están organizadas, no están capacitadas y no están equipadas para hacer seguridad interior y combatir la delincuencia común”.

La opinión de este abogado, licenciado en Filosofía e Historia, con un MBA en Ciencias Políticas; diplomado en Ohio en Psicología Política; y con otras dos diplomaturas en manejo de Crisis (Harvard) y en Desastres (Pittsburgh); toman relevancia, luego de que la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y su segundo, Eugenio Burzaco, confirmaran ayer que la Casa Rosada analiza destinar efectivos militares en la custodia de "objetivos estratégicos” para poder reemplazar a los gendarmes que actualmente cumplen esta tarea y destinarlos al combate contra la inseguridad.

Bullrich  confió a los medios nacionales que "se está estudiando alguna posibilidad, pero todavía no está nada decidido”, y destacó que "además de reforzar el Gran Buenos Aires y Mar del Plata” con la presencia de mayor cantidad de efectivos de fuerzas federales, también es necesario "reforzar las fronteras”.

"Los pactos internacionales, desde la Convención de Ginebra, para abajo, aclaran por qué no puede salir el Ejército a combatir a los ladrones: por una cuestión muy simple: la desproporción de fuerzas, no se puede combatir a la delincuencia común con tanquetas artilladas, es como usar un elefante para acabar con una hormiga, nos destroza la casa”, grafica Marulanda.

A la vez que señala que "en la mayoría de los países de América latina la corrupción contribuyó a la desinstitucionalización de las fuerzas de seguridad. Las Policías latinoamericanas, a excepción de los Carabineros de Chile, tienen una pésima imagen entre los ciudadanos. Y los gobiernos piensan, tienen el pensamiento de que la presencia del Ejército en la calle demuestra autoridad, que la presencia de los soldados intimidará a los delincuentes comunes. Pero la situación en vez de arreglarse va a empeorar”.