Musso anunció que el Festival de Cosquín está "fundido"

El intendente electo Gabriel Musso acompañado de todos los integrantes de la Comisión Municipal de Folclore de esta ciudad eligió la Fiesta del Duende para señalar la crisis económica que atraviesa la Comisión.
martes, 13 de octubre de 2015 · 16:11
Cosquín. El intendente electo de Cosquín, Gabriel Musso, acompañado de todos los integrantes de la Comisión Municipal de Folclore eligió la Fiesta del Duende para señalar la crisis económica que atraviesa el festival más importante de la Argentina.
 
"El festival es un auto chocado y fundido y tiene una deuda de 7,6 millones de pesos a proveedores, artistas, SADAIC, entre otros" y eso hace que su gestión recién podrá poner en marcha su proyecto "en la edición de 2017". "La idea es que en enero la gente se lleve la agenda de actividades de todo el año", dijo el intendente que asumirá en diciembre.
 
En la conferencia de prensa que ofreció en la tarde del sábado, Musso no agregó nada a lo que ya trascendió y que El Diario viene publicando sobre el futuro del festival. Ratificó que los miembros de la Comisión recibirán un sueldo y dejarán de trabajar ad honorem como fue históricamente.
 
Concretamente sobre la edición 2016 no dio precisiones, sólo informó que están conversando con los artistas más taquilleros pero que la barrera es lo económico y la situación podría torcer el rumbo de lo que quiere Musso para el mayor evento de la ciudad. Si bien no lo dijo, se podrían reeditar algunas prácticas negociadoras que él mismo criticó.
 
Lo cierto es que Musso y sus secretarios de programación, Damián Torletti y Cristian Brossard, aprovecharon la Fiesta del Duende para anunciar inquietudes, intenciones y su sentido voluntarista.
 
Uno de los objetivos que se plantearon es darle un carácter "popular" al festival, y para ello habrá entradas desde los 100 pesos por noches que tendrán hasta 20 artistas. También, el fogón oficial será recuperado por la Comisión que lo cederá a instituciones de la ciudad. Este año, como adelantara El Diario no se realizará el Congreso del Hombre Argentino ni la Feria del Libro, sólo quedarán en pie la Feria de Artesanías que cumplirá 50 años y el Encuentro de los Poetas con la Gente.


Una muestra que decepcionó
 
Si la Fiesta del Duende iba a ser la muestra de los cambios que pregonaron desde Proyecto Cosquín para "salvar el festival" desde sus raíces, la comunidad coscoína estará en problemas. No hubo ningún vestigio de cambio. El programa de actividades fue diferente al que se vino organizando. Sólo se cambió de escenario. Ahora el negocio, en el buen sentido de la palabra, se trasladó a la peña La Herradura, donde faltó la poesía, la historia y esencialmente el pueblo coscoíno.
 
En su momento pico, el domingo donde actuaron Emiliano Zerbini y Bruno Arias a cambio de algo como podría ser un buen horario en una noche festivalera, la Fiesta del Duende pareció a un acto político de campaña donde se festejaba un triunfo; pero de muestra que algo cambiaría en la Comisión Municipal de Folclore y en el festival no hubo nada. Mucha gente de Proyecto Cosquín, muy pocos turistas.
 
Lejos, muy lejos de mostrar lo que necesita un festival de la envergadura de Cosquín para volver a estar en carrera en una época donde dista mucho de los años 60, la Fiesta del Duende pasó sin los duendes.
 
Musso transita una línea de riesgo como un dirigente abrumado por la realidad socioeconómica que va a heredar y divorciado de varios de sus colaboradores que pregonan buenas intenciones alejados de las posibilidades. Da la sensación que ni el disfraz de Superman que usó en la fiesta de su cumpleaños lo motiva en estos momentos a menos de 60 días de asumir.
 
Como un dirigente perspicaz el intendente electo intuye que está consumiendo las mieles de su triunfo electoral antes de tiempo y no podrá culpar al estado de cosas cuando le falten respuestas para los problemas, porque lleva años como dirigente, como concejal y preparándose para gobernar su pueblo.

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